Si a nosotros nos afecta el regreso al trabajo después de unas ricas y merecidas vacaciones, por qué no les va a afectar de la misma forma el regreso al cole a nuestros hijos. Para evitar los berrinches, malas caras, etc., los expertos apuntan a un par de consejos que podemos aplicar para que el comienzo del colegio sea algo agradable.


- Entusiásmele con la idea: Recuerde a su hijo que va a ver a sus antiguos amigos, que va a poder realizar actividades extraescolares, que va a aprender toneladas de cosas nuevas...

- Refuerce su autoestima y anímele de cara al inicio de la etapa escolar. Refuerce su capacidad para superar todas aquellas situaciones que se proponga.

- Evite que el niño falte en los primeros días de colegio. Es en ese periodo cuando van tomando contacto y se van acostumbrando a la nueva situación y por tanto, si faltan estaremos perjudicando su periodo normal de adaptación.

- Deje que participe en la compra del nuevo material escolar (libros, cuadernos, estuches, mochilas, etc.), así como en la elección de sus actividades extraescolares.

- Genere un diálogo abierto y fluído con su hijo para que les informe de cómo le van las cosas en el cole y así poder evaluar tanto su grado de satisfacción como la del profesor, o detectar cualquier situación anómala. Además, así sabrá que lo que él hace en el colegio es importante para tí.

- No dejen de reforzar en a los niños la idea de que cuando acaben las clases, estaremos puntualmente esperándoles (el pequeño nunca deberá encontrarse solo a la salida sin que nadie haya ido a recogerle).

Y además recuérdele que...Ir al colegio es algo útil y positivo, agradable y necesario para ellos. Y que a los profesores se les respeta y obedece. No podemos olvidar que dejamos a nuestros hijos en sus manos durante 5-6 horas al día para que nos ayuden a completar su proceso de crecimiento académico y personal (una tarea nada sencilla y poco provechosa si no se hace en total sintonía con los padres).

Fuente: abc.es y Más Vida en la Red